viernes, 28 de octubre de 2011

ESTA INVERSIÓN SÍ QUE ES RENTABLE – Por Vicky Moreno

     En el excelente blog de Juliana Luisa “Píldoras para pensar” http://pildoras-para-pensar.blogspot.com/2011/10/los-mercados.html  se analiza con maestría el mecanismo feroz de los mercados, convertidos en mecanismos víricos, así como las implicaciones políticas y sociales, que amenazan a la propia democracia.
     Qué son todos esos Frakenstein, todos esos “mecanismos víricos”, más que la propia ambición del ser humano. No creo que los malos sean los otros. Todos queremos el máximo beneficio de nuestras inversiones y no nos preocupamos de la sangre que vaya a financiarse con nuestro ahorro. De hecho, si no invertimos más en los bancos éticos, el cultivo ecológico o el comercio justo es porque no "nos sale a cuenta", es decir, pueden no parecernos tan solventes como un banco "grande" (aunque sucio); decimos no tener seguridad de que sean auténticamente "ecológicos" (los caros productos sanos), ni nos queda claro que no haya que comprar los baratos productos made in china cuando hace nada nos sumábamos a cuestaciones por "los chinitos"... Miramos sólo lo que nos conviene mirar y damos la espalda con argumentos espurios a lo que no nos da el máximo beneficio posible.  Sin embargo, nuestro juicio crítico es feroz para con la conducta ajena
     Somos mamíferos depredadores y estamos contaminados de ambición y afán de lucro. Pecamos poco cuando tenemos poco, pero que no nos pongan en el sitio y hora de justificar la licitud de nuestro beneficio, porque, ignorando con cualquier excusa la magnitud de los efectos o sintiéndonos avalados por el ejemplo de los que hacen lo mismo, también seríamos Judas.
     Si además, los listillos nos juntamos, la justificación ciega está garantizada. Los movimientos depredadores, entonces, se hacen institucionales y desalmados, y se llaman Agencias, “Gs”, entidades financieras, iglesias, Banco Mundial o Fondo Monetario Internacional.
     ¿Quién se está ganando el infierno sin darse ni cuenta? ¿A quién le está interesando y mucho la crisis? El dinero no se evapora ¿a dónde se ha ido sin darse ni cuenta? ¿A qué “fuerza oscura” le está rentando el que sigamos alimentando el miedo y el pesimismo? Los mercados no tienen alma, sólo hambre, y, como mi madre decía, no hace falta siquiera la inteligencia porque "dinero llama a dinero".
     Pero, después de todo, en el fondo de la cuestión, no son los bancos, locales ni mundiales, ni siquiera los mercados financieros -al fin y al cabo esos sólo son los vehículos en los que se mueve-. Es el tiranosaurio de la ambición humana, que ciega y envilece y, de tanto engordar, ha volcado el platillo de la balanza, amenazando no sólo a nuestros embriones de democracia, sino a los valores y los ideales de libertad, igualdad y fraternidad que un día unieron a los hombres y  fecundaron nuestras constituciones. No queda otra que colaborar en su extinción.
     Habrá que partir de cero, aceptar nuestra cuota de compromiso en el cambio y empezar por ejercer ciudadanía y autocrítica.  Pensar mejor y hacer lo mejor en casa, en el trabajo, en sociedad, en política, pero sobre todo en educación: enseñar (siempre con el ejemplo) a cultivar la ética, la transparencia, la sencillez, la justicia, la empatía, la alegría, el respeto, la solidaridad, la compasión.... En definitiva, el pensamiento positivo, las normas basadas en valores y las conductas impulsadas por la serenidad, la bondad y el discernimiento.
     Sé que suena utópico en estos tiempos selváticos, sé que parecen aspectos arrollados ya por la apisonadora del consumo, pero se impondrán por pura supervivencia de la especie.
     Aunque nosotros no lleguemos a ver los resultados… esta inversión sí que es rentable.
                                                                   
                           Vicky Moreno / Octubre 2011
                     

lunes, 17 de octubre de 2011

CANTAR, UN PRIVILEGIO Por Vicky Moreno


            Hoy tuve la fortuna de compartir la interpretación a nueve voces de la Misa Pro Victoria, de Tomás Luis de Victoria, con setenta compañeros, venidos algunos de puntos distantes de nuestra geografía, bajo la Dirección Musical de Ana Fernández-Vega y Dirección Técnica de Alfredo García.
          En sólo día y medio de ensayos, las instrucciones y certeros ejemplos de estos magníficos maestros hicieron que el I Curso de Polifonía Española que organizaba el Coro de Cámara de Madrid nos motivara y embriagara a todos, consiguiendo que sonara hasta bien una obra tan delicada y compleja como esta.
            Sentirse en medio de este estallido armónico es algo difícil de describir y, por momentos, difícil también de experimentar sin que las emociones te hagan perder el control del compás, pero eso sería algo terrible, cuando no te puedes permitir ni un segundo de vacilación o pérdida de “espacio” en el instante de emitir la voz, ni cabe un mínimo desajuste en timbre, intensidad, carácter, entonación o empaste entre los componentes de las nueve cuerdas, que han de sonar como fue previsto por el homenajeado compositor.
            Siempre me he preguntado cómo los músicos, y los directores especialmente, pueden hacer correr su visión casi holográfica por el pentagrama, percibiendo a la vez -y avisando con precisión- de todo lo que sucede en esos anchos pasillos sonoros. En esta ocasión, Ana se las apañó magistralmente con las nueve pistas y Alfredo hizo que paseáramos por ellas con la seguridad que nos daba notar nuestro instrumento bien ajustado.
            Cantar es un privilegio que nunca podré agradecer bastante; por eso, cuando surge la oportunidad de aprender algo nuevo de personas expertas, compartiendo buenos momentos con otros cantantes, siento la necesidad de aprovecharlo y, como ha sucedido esta vez, termino profundamente agradecida a todos los que se han tomado la molestia de organizar un evento del que obtengo tanto a cambio de tan poco.
            Muchas gracias por este curso al Coro de Cámara de Madrid.
Muchas gracias a cuantos seres humanos produjeron y producen belleza.

Vicky Moreno   
            

sábado, 8 de octubre de 2011

EMOCIONES VS SENTIMIIENTOS - V. Moreno

http://www.youtube.com/watch?v=KkObnNQCMtM

Me regalan una versión para coro de este maravilloso adagio que abrió nuestro concierto del sábado, pero interpretado por la orquesta...y, pese a que fuera concebido así, yo necesito cantarlo. Cuando se experimenta la sensación de estar siendo música, ya hay veces que no te vale con sólo escucharla. 

Cantar me transporta a un lugar sin tiempo donde los sentimientos no son un producto menor, sino que sólo ellos lo ocupan todo, como si esa fuera nuestra naturaleza esencial y vocación superior.
Aunque el lenguaje popular usa indistintamente ambos términos, yo encuentro una diferencia esencial: Las emociones nacen y los sentimientos se hacen. Es decir, para mí, los sentimientos están dos pasos después, porque son el producto resultante de atomizar lo emocional, difuminar el ego y sublimar la razón.  Emocionarse es un instinto provechoso para la especie, pero sentir es una elaborada facultad cargada de consciencia, discernimiento y abandono en LO QUE ES.
Del mismo modo, querer y amar, no deberían ser sinónimos porque, hasta en su etimología, refieren la gran diferencia de grado y calidad que existe entre el apego del “querer” y la voluntad de bien que es “amar”.